Yo soy vs Estoy siendo

“Cuando viene un viento fuerte, el duro roble se rompe, pero el bambú se dobla… y sobrevive” Proverbio Chino.

yo soy vs estoy siendo

Muchas veces al definirnos a nosotros mismos, decimos cosas como: yo soy ingeniero, yo soy nerviosa, yo soy feliz, etc. Si se fijan, el “yo soy” es la constante. En cierto sentido, esta forma de hablar no es un problema, ya que sólo son palabras para referirnos a nosotros mismos. Sin embargo, tiene un aspecto que puede ser difícil, y es cuando olvidamos que eso que somos no es estático, sino que se transforma constantemente.

Por ejemplo, ¿has notado cuanto has cambiado, en todo sentido, desde que naciste, hasta el día de hoy?

El cuerpo es un claro ejemplo, pues cambia todo el tiempo. Lo que sucede es que no nos damos cuenta hasta que es realmente notorio: cuando ya vemos nuestra cabeza con menos pelo, los pantalones no nos entran, o nos quedan muy grandes, etc. Es en ese preciso momento, donde quizás nos alarmarnos por los cambios, ¡siendo que suceden siempre!

Al decir “yo soy” tal o cual cosa, nos encerramos con definiciones, que, aunque nos dan seguridad porque son predecibles, finalmente pueden terminar por atraparnos y asfixiar. Un ejemplo claro es ver que el que sufre porque se considera malgenio, difícilmente podrá dejar de serlo, a menos que empiece a pensarse de otra forma. De hecho, no es malgenio todo el tiempo, lo que prueba que no es en esencia malgenio, sino que a veces se pone así. Hay una gran diferencia.

Entonces, entender y aceptar que la vida es variable, nos permite ver que tenemos el derecho y la posibilidad de adaptarnos o cambiar cuando lo necesitemos.

Por lo mismo, les propongo un cambio práctico: ¿Qué pasaría si en vez de decir “yo soy” decimos frases como “en este momento me siento/pienso así” o “estoy siendo de tal forma”? Ahí las cosas son distintas, porque introducimos la posibilidad del cambio en nuestras vidas, y, por tanto, no tenemos que estigmatizarnos con una forma de ser.

Por supuesto, no es necesario ser demasiado literal y empezar a hablar así siempre, pero si tener la consciencia de que el “yo soy” es transitorio.
Ojo también, que hay una parte de nosotros que no cambia, nuestro ser, pero esa dimensión no tiene que ver con cosas superficiales como el trabajo, el cuerpo o nuestras ideas de nosotros mismos.

Entonces, si estás aburrido de cómo estás siendo, ¿por qué no te das la oportunidad de transformarlo? Las posibilidades se abren ante ti, solo permítelo. Esta semana empieza a cambiar el “yo soy” y deja espacio abierto para lo que venga. Date cuenta de que nada es permanente y no estamos atrapados por ninguna definición. Permite que entre aire nuevo a tu vida.